Las callosidades se producen por un exceso de presión en una superficie ya sea entre el zapato y la piel como ocurre en el 5º dedo o entre dos dedos. Cuando aumenta la presión en dos prominencias óseas, la piel aumenta su grosor y duele. Es lo que comúnmente se llama "Ojo de Gallo" y está producido por un pico de hueso que ha crecido entre los dedos.
La primera opción es acudir a un profesional a retirar la lesión. Se trata de retirar el callo doloroso y realizar un dispositivo mediante silicona que evite que el pico de hueso vuelva a formar otro callo.
Actualmente existen en el mercado cremas o preparados que contienen ácidos que queman la callosidad pero hay que retirarla y dado que en el pie el movimiento es continuo, es importante colocarlas en el sitio deseado y fijarlas bien para que no quememos la piel sana.
Tratamiento definitivo mediante cirugía ambulatoria para retirar el pico de hueso responsable de la aparición del callo.